Ante una oposición ausente en la discusión de temas transcendentes
“Tonino” Guinter pronosticó el resultado de las PASO: “Capitanich va a ganar por paliza, como lo hizo Valdés en Corrientes”.
El jueves 2 de septiembre se celebró el día de la industria nacional, y el Chaco tuvo la particularidad de recibir por cuarta vez, desde que asumiera el 10 de diciembre del 2019, al Presidente de la Nación Alberto Fernández. El mandatario nacional cumplió por la tarde de ese jueves dos actividades centrales: la primera lo relacionado justamente con el día de la industria, yendo en primer término a la planta industrial que la empresa Palacios Hermanos tiene en Fontana, para encabezar después el acto central del día de la industria. Posteriormente el presidente, siempre acompañado por el gobernador Jorge Capitanich y otras autoridades, recorrió el Parque Industrial de Puerto Tirol. De allí, Alberto Fernández lideró el acto de campaña en respaldo a los precandidatos de las listas oficialistas, sobre todo de los diputados nacionales del Frente de Todos Chaco Lista 501 R.
Aquí el análisis es para propios y extraños, como dice el refrán. O para aquellos que de alguna manera no se inmutan con la llegada de un dignatario como lo es el Presidente de la Nación. O no se inmutan con el acontecimiento de esta celebración del día de la Industria Nacional, ue siempre fue un sesgo meritorio y destacable aquí en la provincia del Chaco. Más hoy, con la enorme dedicatoria que la administración Capitanich le propone al pueblo chaqueño, incluso yendo al tuétano, poniendo en profundidad al bisturí y planteando que llegó el momento de acompañar el crecimiento económico de la clase media y de los que más tienen, que son los menos, y de transformar y plantear un cambio de paradigma en la clase media más baja, como así también en aquellos que son vulnerables, y que entre otras cosas, hoy están percibiendo un plan social y no tienen trabajo regulado o no tienen trabajo en blanco.
La dirigencia piquetera ve peligrar su negocio: el clientelismo
En ese contexto, el presidente pro témpore del Norte Grande Jorge Capitanich tiró ese desafío a sus colegas de las nueve provincias que integran ese Norte Grande al plantearles precisamente este cambio de paradigma, acompañando incluso el mismo desafío que se puso el presidente Alberto Fernández, que cuando lo hizo conocer en la capital de la Argentina en la ciudad de Buenos Aires, debió pasar por lo mismo que ocurre acá en el Chaco: los movimientos sociales se empezaron a mover con un clima caldeado, alentado por la oposición y los mandamás, los cabecillas de los movimientos sociales, que están viendo peligrar su fuente de ingresos, que no es nada más ni nada menos que el clientelismo social inmerso en el escenario político.
Oficialismo propone, la oposición destruye
Decía yo, el presidente Alberto Fernández vino en un escenario en el que inclusive hoy, está siendo hostil a la sociedad chaqueña. ¿Por qué hostil a la sociedad chaqueña? Respondo con dos ejemplos. Dos acontecimientos, dos eventos que hoy tendrían que haber tenido, para que tener éxito en sus desafíos, la presencia de todos los sectores sociales. Cuando hablo de todos los sectores hablo de la oposición. Pero la participación de la oposición fue nula.
Otra vez es como que si de pronto el oficialismo trabajará como una especie de zanahoria en la campaña, mientras que en la oposición lo único que hace es vulnerar ese trabajo, y sin ninguna duda, conspirar contra el bienestar de la sociedad. ¿Por qué? Porque cuando se tomen las decisiones y no estén incluidos ellos, seguramente en sus expresiones van a rezar de qué el oficialismo hizo tal cosa, que no nos permitió tal cosa etcétera etcétera. Esos planteos a los que nos tienen acostumbrados los dirigentes opositores en Chaco.
¿Es posible regular las protestas sociales con cortes de calles?
El titular del Poder Ejecutivo, el gobernador Capitanich, convocó en la semana que pasó a los tres poderes del Estado, como también a sectores sociales y económicos, a dirigentes de peso del poder económico y del poder social, para encontrar protocolos que reglamenten la protesta social.
De ninguna manera la intención del gobernador pasa por anular la protesta social. Al contrario, Capitanich fue uno de los dirigentes políticos, o quizás el único en función de la primera magistratura provincial, que aceptó que los movimientos sociales se manifiesten, protesten, pero nunca vulnerando derechos de aquellos que tienen que circular, o de aquellos que tienen que trabajar.
No es casual en ese aspecto que la ministra de seguridad y justicia de la provincia, Gloria Zalazar, había señalado ante la prensa provincial que precisamente sería el gobernador el que iba a anunciar y convocar esta reunión multisectorial para encontrar ese protocolo a través de un amplio consenso, y tener así un equilibrio entre el derecho de manifestarse y el derecho de circular.
La conspiración opositora
No puede haber cortes de calles con tanta recurrencia y naturalidad en la provincia. Por eso era clave este encuentro multisectorial. Pero se sabe cómo terminó esta historia: la oposición pegó el faltazo a este encuentro tan trascendente. La oposición no fue, y fíjese, el otro día planteaba que hay conspiraciones de adentro y de afuera. Los de afuera ya sabemos que, como decía alguien, son traidores a la causa del pueblo. La causa del pueblo puede ser representada por el oficialismo o de la oposición. No importa quién sea, pero hay una causa en el pueblo. Pero precisamente la oposición faltó a la cita, y vaya a saber si lo hizo o no en un acto de conspiración, pero lo cierto es que faltó y había sido invitada.
También fueron invitados todos los bloques políticos del poder legislativo. Habían sido invitados, pero casi todos los bloques opositores no fueron. ¿Por qué no fueron? Esa es la gran pregunta que deben responder sus dirigentes.
Después, hay otro acto que sin ninguna duda también representa una conspiración: la oposición decidió dejar sin representación, sin quórum, a la sesión que debió desarrollarse el miércoles. Con esta ya van tres sesiones consecutivas en las que, principalmente desde el bloque de la UCR chaqueña, se promueve a la falta de quorum, y por ende, deja trunca el debate de un sinfín de temas relevantes.
Justamente en la sesión de este miércoles 1 de setiembre se tenían que tratar temas importantísimos como el traslado de tierras de la provincia con fines específicos al Municipio de Resistencia. Ante esto, naturalmente que los 32 legisladores tienen que participar con un sí con un no, o con una abstención, pero tienen que laburar. Como lo dijera en Contracara el diputado Juan José Bergia: “todos estamos en campaña pero hay que venir a laburar”.
Este es el tema entonces. Vino un presidente de la Nación, ¿y con que se encontró? Con la ausencia de la oposición. Estaban todos los sectores de la comunidad menos la representación política de la oposición. Lamentablemente esta es la eterna costumbre, de nunca acabar. Una historia que se repite, una y otra vez: la oposición nunca acompaño. Casi que se ha tornado una costumbre. Así uno plantea el esquema filosófico de que el pueblo le confirió a la oposición un rol determinado. El pueblo del dice “ustedes controlen”. El punto es, ¿cómo va a controlar si no asiste a las reuniones? El pueblo no le dijo a la oposición “trabajen solamente cuando les convenga”.
¿Se debería multar a diputados que falten sin excusas valederas?
Ante esta conducta reiterativa de la oposición, planteo un interrogante. ¿No habría que implementar mecanismos de sanciones para los diputados que boicotean el desarrollo de una sesión al no dar quorum? ¿No se les debería descontar los honorarios de los diputados que falten a una sesión sin justificativo alguno? Así como le descuentan a los docentes cuando hacen paros, o como les descuentan al sector privado, sobre todo al empleado común, a los diputados que faltan al laburo ¿no se les tendría que descontarle el sueldo y ponerle una fuerte multa? Digo fuertes multas porque los descuentos que hay hoy son mínimos, son una minucia. Entonces algunos diputados se dan el lujo de faltar por tres sesiones consecutivas. ¿Cómo es posible que hace 3 semanas la legislatura no pueda sesionar sobre temas que son fundamentales?
Este es el escenario que lamentablemente acaparan los títulos de los medios: el fracaso de otra sesión legislativa y el avance en la construcción de un protocolo, pero sin los actores que deberían estar. Entonces, todo el esfuerzo que se hace se tira un poco para atrás. Un poco nomás, porque hay que decir algo: el pueblo no es estúpido, el pueblo sabe. Así como en Corrientes ganó el oficialismo con más del 70% de los votos. Fue una paliza que recibió un peronismo dividido, diezmado. Aquí la oposición va a perder también de la misma manera que perdió el peronismo en Corrientes. Acá, el pueblo chaqueño va a premiar el esfuerzo qué está haciendo para resolver los problemas de la provincia, cargándose al hombro esa responsabilidad, el montenegrino Jorge Milton Capitanich.
