Electro Fans: crece el consumo por temor al salto del dólar y precios más baratos que en el exterior

Impulsado por el aumento de las ventas, el evento de descuentos seguirá hasta el fin de semana. Los motivos que impulsan la demanda y los productos más comprados.

Impulsado por el ‘veranito’ que vive el sector de electrodomésticos y electrónica, se extendió el evento de descuentos Electro Fans con el objetivo de continuar captando a consumidores que tienen pesos guardados y quieren gastarlos antes de que se sigan devaluando.

Hasta el 19 de marzo inclusive, se podrán conseguir artículos rebajados un 25% en promedio, con financiación de 3 y 6 cuotas y los programas Ahora 10 y 12 en los locales, los sitios web y la venta telefónica de las cadenas que participan de la maratón de ofertas.

Crecen las ventas del sector, con aires acondicionados a la cabeza

En lo que va de esta tercera edición del festival de descuentos, los retailers registraron en promedio un 12% más de ventas respecto de los dos eventos que se llevaron a cabo en marzo y septiembre de 2022. Algunos players del interior incluso multiplicaron por ocho las transacciones.

“Hasta ahora, los resultados son positivos y superiores a los anteriores Electro Fans. La gente está resguardando su capital en bienes durables por la devaluación. Muchos aprovechan el evento para concretar compras que tenían previstas, accediendo a descuentos en esta oportunidad”, analizó Juan Manuel Almeida, vocero de la organización de Electro Fans y gerente de marketing de Cetrogar, una de las casas de electro adheridas, con más de 100 sucursales distribuidas en 17 provincias.

La búsqueda de precios y comparaciones de productos se vio reflejada en el alto incremento del tráfico web que reportaron las plataformas de e-commerce de las empresas participantes, con un alza del 80% en las visitas a sus sitios online, como en el caso de Frávega, que lo que más vendió fueron productos de ventilación.

En ese sentido, a diferencia de las anteriores ediciones, este año sorprendió la demanda de aires acondicionados y ventiladores, una categoría que no esperaban que se vendiera tanto. “Son los protagonistas por la ola de calor. Habitualmente, no es un rubro que en esta época se suela comprar”, comentó Almeida.

Detrás de esta categoría, se ubicaron artículos de línea blanca, como heladeras y lavarropas, y pequeños electrodomésticos para el hogar, como pavas, licuadoras, exprimidores y batidoras.”Las ventas estuvieron por encima de las expectativas y se vendió más de lo previsto en todas las líneas de productos. Hubo más disponibilidad de surtido que en 2022, pese a que persisten las trabas a las importaciones”, explicó Almeida.

“Los más complicados en stock son celulares, computadoras y gaming como la Play Station. Aunque los precios aumentaron considerablemente, las ventas también crecieron en estos segmentos, pero menos que el resto”, afirmó el ejecutivo.

“Por las altas temperaturas, vendimos bien aires acondicionados, que fueron la estrella esta vez. También lavarropas, heladeras, cocinas, televisores, celulares y notebooks por la ‘vuelta al cole’, aunque menos que equipos de refrigeración”, destacó José Manuel Pardo, director de la firma homónima que creó su padre.

Las líneas de financiación que ofrecen estas cadenas del interior, que están en auge tras el declive de grandes jugadores como Garbarino y Ribeiro, es clave para llegar a nuevos segmentos de consumidores. “Al tener 70 sucursales en Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Neuquén, la gente se acercó a las sucursales por nuestros créditos personales para nuestro porfolio con distintas categorías como colchones, muebles, bicicletas y motos”, apuntó Pardo.

Por qué crece el consumo de electrodomésticos y electrónica

Varios motivos explican la demanda sostenida. En la compra de bienes durables, influye el temor a un salto en la cotización del dólar, en un año electoral marcado por la incertidumbre macro; la búsqueda de un refugio de valor, ante la acelerada inflación y la depreciación del peso, y las restricciones a la compra de moneda extranjera.

Los precios más baratos que en el exterior también inciden. “Antes, la gente viajaba y se traía un celular o un televisor. Ahora, mayormente compran indumentaria. Por el tipo de cambio, en términos generales, la electrónica en la Argentina hoy está más barata que en otros países, con el agregado de financiar las compras, algo que no se puede hacer con los consumos en el extranjero”, destacó Almeida.

“La demanda está impulsada por la propensión al consumo. Cuando el horizonte de planificación se acorta por la incertidumbre que existe, lo más probable es que el consumidor tome la determinación de gastar más, a pesar de la inflación y la pérdida de poder adquisitivo. Los compradores aprovechan así las facilidades de pago y promociones, en este contexto en el que los ‘pesos queman'”, analizó el economista Santiago Manoukian, jefe de Research de la consultora Ecolatina.

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