El pedido de detención del juez Miguel Aranda salpica a la UCR en plena disputa por candidaturas
En 2018, luego de haber estado tan sólo un año y tres meses en Anses, el presidente Mauricio Macri elevó al Senado
La orden librada por la jueza Federal Zunilda Niremperger de allanar la casa y las oficinas del juez federal de Sáenz Peña Miguel Aranda es con seguridad la punta de un iceberg que no sólo impactará en la Justicia y en las fuerzas de seguridad, sino que promete desatar una tormenta política. Y es que Aranda, aparte de juez, fue un activo militante de Convergencia Social, exfuncionario de Cambiemos y exabogado de Ángel Rozas.
“Conocemos a Miguel y sabemos que tiene la capacidad, el compromiso y la responsabilidad necesarias para hacer una gran tarea en Anses”, decía el flamante jefe regional del organismo, Leandro Zdero, en mayo de 2016 cuando nombraba a Miguel Aranda al frente del UDAI (Unidad de Atención Integral) Chaco. Tanto lo conocían, que el Director Nacional de Relaciones Institucionales del organismo, Patricio Piffano, lo llamaba “Migue”. Con un gobierno del palo y tantos amigos, su despegue fue meteórico.
En 2018, luego de haber estado tan sólo un año y tres meses en Anses, el presidente Mauricio Macri elevó al Senado el pliego para nombrarlo conjuez de la Cámara Federal de Apelaciones de Resistencia, y lo ratificó luego mediante el Decreto 1103/18 que también lleva la firma del exministro de Justicia Germán Garavano.
El 13 de diciembre fue designado en el mencionado cargo, y unos días más tarde, mediante una resolución administrativa de la Cámara Federal de Apelaciones de Resistencia, fue nombrado juez Federal Subrogante de Pcia. Roque Sáenz Peña. Juró por Dios y la Patria sobre los Santos Evangelios, y asumió el 1º de enero de 2019 en lugar del también subrogante Aldo Mario Alurralde. Allí comenzó la nueva y polémica carrera que terminaría en escándalo.
Por el momento ni Zdero ni Rozas se pronunciaron sobre la situación judicial de su correligionario y amigo caído en desgracia, enfocados como están en la ocasional “rivalidad” de la campaña. Zdero quiere ser gobernador y desafía el liderazgo del caudillo radical y líder de Convergencia Social Ángel Rozas, que lo prefiere como candidato a intendente de Resistencia: lo que menos necesitan ahora es que los relacionen con un potencial narco-juez, incluso si llegó al cargo gracias a la influencia política del partido.
En cambio, sí lo respaldó el Colegio de Abogados a través de su presidente, Sergio Soucasse, que en un comunicado afirmó que Aranda “es conocido por ser una persona honorable y de respetada trayectoria profesional , judicial y académica”, y pidió “la urgente solución del caso” para evitar la condena mediática y social.
La solicitud de detener a Aranda elevada a Niremperger por el equipo de fiscales federales integrado por Diego Iglesias, Federico Carniel, Patricio Sabadini y Carlos Amad, supone la semiplena prueba de que Aranda pidió coimas, apañó a gendarmes procesados por plantar droga y montar procedimientos truchos, y filtró información para entorpecer el arresto de narcotraficantes, en especial los vinculados al “clan Sosa” que asola a la ciudad termal desde hace varios años.
Además de Aranda, también se pidió la detención de los gendarmes Cristian Daniel Marangón y Alberto Martín Farías, y del presunto narco Walter Ayala.
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