Cruje el Poder Judicial del conde Morales


Los tres pedidos de juicio político datan del 18 de abril. Altamirano es acusada de denegación de justicia ante un reclamo de una abogada

Renuncias en el Superior Tribunal de Jujuy y aroma juicios políticos.

El Supremo cuenta con 9 puestos tras la modificación realizada por Gerardo Morales.Al pedido de juicio político contra los supremos Elizabeth Beatriz Altamirano, Clara Langhe de Falcone y Sergio González; estos respondieron presentando sus renuncias y se rumorea que el presidente del Superior Tribunal de Justicia, Federico Otaola, y el vocal José Manuel del Campo tendrían tomada la decisión de presentar las suyas.

Los tres pedidos de juicio político datan del 18 de abril. Altamirano es acusada de denegación de justicia ante un reclamo de una abogada, lo que se suma a un fallo por reclamos de alimentos por parte de la suegra de Morales. Cuando los hechos tomarón estado público la jueza presentó su renuncia. El pedido de juicio político contra Gonzalez, quien asumió como supremo durante el gobierno de Eduardo Fellner, es por malversación de caudales públicos en el marco de la construcción del Centro Judicial de San Pedro de Jujuy.

Tal vez el caso de la jueza Falcone es el más estridente dado el lugar que ocupa dentro de la trama judicial. La militante radical que fuese legisladora provincial y nacional, e intendenta de San Pedro llegó a la Tribunal el año que Morales determinaba la ampliación de los miembros y asumiendo la presidencia del mismo. Se la señaló por haber colocado a Gastón Mercau, su yerno, como juez de control; es quién en 2016 firmó la detención de Milagro Sala.

El pedido de juicio político contra Falcone está fundamentado en que incurrió en abuso de autoridad y tráfico de influencias al conseguirle trabajo en el Poder Judicial no solo a su hijo sino también a su nieto, hijo del magistrado penal. También la acusan de no haber presentado su declaración jurada de bienes en tiempo y forma y dictar órdenes fuera de su órbita. Otros dos pedidos de juicio político estarían preparandose contra el presidente de la Corte jujeña, Federico Otaola, un exdiputado radical que entró con la ampliación de 2016, y José Manuel del Campo, un socio del estudio de Fellner quien ocupa el cargo desde 1998.

Otaola se encuentra en edad jubilatoria y padecería problemas de salud; pero se desconocen los fundamentos de su pedido de juicio político, al igual que en el caso de Del Campo. Se especula que los pedidos serían presentados por algún abogado o abogada del foro local, tal como ocurrió con los pedidos contra Altamirano, Falcone y González. Ekel Meyer, ex ministro de Seguridad de Morales; Laura Lamas, también militante radical; y los justicialistas Sergio Jenefes y María Silvia Bernal son quienes conservarían sus cargos como supremos.

El manto de sospecha no solo pesa sobre el STJ; todos los jueces de control penal de San Salvador de Jujuy están con causas en su contra, primero desde el Ministerio Público de la Acusación, y luego entre ellos. Las causas aparecieron después de que los magistrados se dirigieron al STJ en un escrito en el que aseguran que el desempeño de los fiscales del MPA atenta contra las garantías naturales de los ciudadanos.

Algunos jueces de control advirtien que si un fiscal, pide algo a un juez y no le da lo que quiere, se va con el mismo escrito hasta que obtener un juez que le de lo que quiere. Esto viola la jurisdicción y la competencia de los jueces. Los jueces le preguntaron al STJ qué debían hacer, pero los cortesanos les respondieron que ellos no están para eso y mandaron a archivar las actuaciones.

El senador nacional Guillermo Eugenio Mario Snopek insistió con el pedido de intervención del Poder Judicial de la provincia afirmando «Están dadas todas las condiciones». Por su parte la presidenta de la Asociación de Abogados de Jujuy, Claudia González, manifestó que «ya no se puede hablar de un avance peligroso del Poder Ejecutivo sobre los otros poderes, la Legislatura y el Poder Judicial, como decíamos hace cinco años, sino que en Jujuy, directamente, funciona un solo poder».

Fuente consultada: submarinojujuy








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