Guzmán habló sobre “la etapa crítica” que atraviesan las negociaciones con el FMI
“La diferencia que tenemos con el FMI es la velocidad de consolidación fiscal y las combinaciones entre gastos e ingresos.”
El ministro de Economía habló con el diario francés Le Figaro; aseguró que la inflación será su “prioridad” y afirmó que el Gobierno busca que “no haya un financiamiento sistemático del Banco Central al Tesoro”
Mientras que el Gobierno intenta cerrar un acuerdo a contrarreloj con el Fondo Monetario Internacional (FMI), este viernes el ministro de Economía Martín Guzmán habló con la prensa internacional y se refirió a la “etapa crítica” en la que se encuentran las negociaciones con el organismo multilateral.
“La diferencia que tenemos con el FMI es la velocidad de consolidación fiscal y las combinaciones entre gastos e ingresos. No queremos penalizar la demanda cuando la economía se está recuperando”, argumentó el funcionario en diálogo con el diario francés Le Figaro, en línea con el discurso que brindó delante de los gobernadores a comienzos de este mes. Para Guzmán, de seguir con la trayectoria pronosticada por el Fondo, se frenaría el crecimiento y “la credibilidad” del programa de apoyo.
En ese marco, el ministro apuntó que la Argentina “tiene la oportunidad de continuar su recuperación sin la carga de una deuda insostenible”. Si bien resaltó que el Gobierno “quiere llegar a un acuerdo”, apuntó sobre la necesidad que tiene el país de contar con un mayor plazo para pagar los US$44.000 millones que adeuda.
“El programa stand by de 2018 con el FMI no logró ninguno de sus objetivos: no permitió que la Argentina retomara su crecimiento, no controló la inflación ni protegió a los más vulnerables. Por el contrario, ha agravado la recesión, el desempleo, la pobreza y la inflación”, argumentó.
A su vez, Guzmán hizo hincapié en la reducción del déficit primario en el último año. Ayer se conoció que 2021 cerró con un déficit de 3% del PBI, la mitad de lo que hubo durante el año de la pandemia (6,4%). “La Argentina necesita continuar por este camino, que está sucediendo ahora, en un proceso de consolidación fiscal virtuosa porque eso fortalecerá nuestro crédito y nuestra moneda. Y la Argentina también quiere converger a una situación donde no haya un financiamiento sistemático del Banco Central al Tesoro”, afirmó. En diciembre, el financiamiento monetario finalizó en torno de los $680.000 millones (1,5% del PBI), un máximo de la historia reciente para ese mes.
En cuanto a la inflación, uno de los temas que seguirá presente este año -los economistas lo ubican por encima del 50%-, el ministro de Economía aseguró que será su “prioridad, junto con la creación de empleo”.
“La inflación tiene múltiples causas, entre ellas un componente monetario, ligado al histórico problema de balanza de pagos de la Argentina. Cuando la economía crece, si las exportaciones no siguen el mismo ritmo, se producen tensiones en la balanza de pagos que provocan una depreciación de la moneda y alimentan la inflación. Segundo factor: la financiación del déficit público. La falta de mercados de capitales domésticos se suma a las presiones inflacionarias. Estamos en el proceso de desarrollar estos mercados, la financiación nacional está progresando significativamente”, cerró.