Ante información falsa
El ministerio de Salud del Chaco aclara que todos los test rápidos de antígenos que se realizan en la provincia están autorizados por Anmat.
Ante la divulgación de información falsa sobre la autorización y validez de las pruebas rápidas de detección de COVID-19, el Ministerio de Salud Pública del Chaco a través de la Subsecretaría de Atención y Acceso al Sistema de Salud aclara que los productos que se utilizan para la realización de test rápidos de antígenos SARS-CoV-2 cuentan con la autorización de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
“Ningún producto que no esté habilitado por la ANMAT puede ser adquirido por ningún Ministerio de Salud del país dado que directamente los productos que no tienen la habilitación no se pueden comercializar en el sector privado y mucho menos venderse al Estado”, indicó la subsecretaria Paula Sartor.
El 27 de octubre pasado se realizó la última licitación para el test rápido de antígenos mediante concurso público en la que se adquirieron 90 mil determinaciones de la marca Abbott. “Es la que se usa mayoritariamente en estos momentos, aunque la sensibilidad reportada por todos los productos que utilizamos es similar”, explicó Sartor en alusión a la marca Medomics, adquirida el 28 julio del año pasado, producto autorizado por la Asociación Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica 2106-139 expediente N° 1-0047-3110-004478-21-4.
Asimismo, desde la Subsecretaría de Atención y Acceso al Sistema de Salud del Chaco explicaron que las pruebas que se emplean para el diagnóstico rápido de COVID-19 son seguras y eficaces, y los porcentajes de efectividad están dentro de los estándares de correlación a los de las pruebas de PCR. “Actualmente con Abbott o, cuando empleamos Medomics como marca mayoritaria, las pruebas mostraron un porcentaje de positividad similar a los arrojados por las pruebas de PCR”, relató.
Todas las determinaciones de detección rápida de SARS-CoV-2 utilizadas por la cartera de Salud del Chaco fueron adquiridas en licitaciones públicas, cumpliendo con los procedimientos administrativos vigentes y tras recomendaciones técnicas realizadas por el Laboratorio de Coordinación COVID-19.
Desde el Ministerio expresaron que para la detección de casos positivos de COVID-19 se sigue un flujograma por el cual en primera instancia se realiza un test rápido de antígenos y luego –para aquellas personas que presenten síntomas y un test rápido negativo- se procede al test por PCR. Este segundo test por PCR sirve para detectar el virus y evitar un resultado falso negativo o bien para confirmar el resultado no detectable de la primera muestra rápida del test de antígenos.
Para la realización del primer testeo se debe tener en cuenta el período de incubación del virus, de lo contrario es posible obtener un resultado no detectable o falso negativo. “Esto nada tiene que ver con la eficacia de las pruebas rápidas empleadas. Hay que tener en cuenta que cuanto más reciente es la enfermedad existen menos posibilidades de detección mediante un test rápido porque la carga viral es más baja”, expresó Sartor.