El rol vergonzoso de la oposición ante el llamado de un gran acuerdo político que hizo Capitanich


con absoluta sinceridad le digo, tranquilidad en muchos aspectos, pareciera ser que sigue la campaña electoral

Editorial de Contracara

Este mes, que fue traumático y que no vislumbra, con absoluta sinceridad le digo, tranquilidad en muchos aspectos, pareciera ser que sigue la campaña electoral. Pareciera ser que el 14 de noviembre no se realizaron las elecciones, y el clima tenso que se vive en el país, y no por lejos que estamos del centro de decisiones que es Buenos Aires, aquí en el Chaco también repercute, y naturalmente la sociedad, el pueblo, el hombre de a pie, aquel que tiene suficiente o incluso el que no tiene problema en llegar a fin de mes, pareciera ser que no están mirando el Chaco que viene y el país que viene.

En esa mirada que uno puede poner descarta la posibilidad de un consenso, de un acuerdo, de un pacto de desprenderse de las miserias de unos para saber que hay un prójimo, ese que está próximo, y lo que pareciera ser es que se hubiera terminado el 14 de noviembre y el 15 empezará otro tiempo, otra época otro ánimo, pero no es así.

Capitanich y una propuesta para debatir el rol de los medios

Fíjese que hace unos días atrás el gobernador del Chaco se atrevió a opinar, porque fue una opinión, de que había que introducir algunos controles en los medios de difusión del país, y todo el mundo salió a pegarle en la matadura y a recordar cuando Jorge Capitanich era Jefe de Gabinete de Ministros, y quizás en un momento no tan ecuánime, rompió el diario Clarín expresando su malestar, su bronca como cualquier mortal, como cualquier ser humano. Ahora Capitanich produjo al mismo tiempo de hablar de esa regulación, que incluso yo concuerdo con él, porque Capitanich no se refería a conculcar uno de los artículos de la Constitución Nacional, qué es la libre expresión o la libertad de prensa, o la libertad de pensamiento, si no que se refería a los medios concentrados, y aquí lo dijimos antes de que lo diga él, que producen un derrame, una inundación de informaciones falsas.

¿Es posible un gran acuerdo nacional?

Así, al comenzar esto que quiere ser un pensamiento en voz alta, una reflexión en voz alta, de ninguna manera una editorial, lo empezamos a decir acá, pareciera ser que continúa y con mayor voracidad, con mayor ferocidad, la campaña política. Fíjese que el gobernador en un documento que publica, pide recuperar el sentido de grandeza y convoca a un pacto político, económico y social. Pero desde la oposición, y más precisamente la cabeza visible de la oposición, Leandro Zdero dice “vamos a ir al diálogo, pero si se cambia el rumbo”, cuando en realidad el que está gobernando es Capitanich. Y es el pueblo el que lo va a sacar o lo va a ungir, de acuerdo a la sabiduría que tiene el pueblo, que de ninguna manera nunca se equivoca. Ni se equivocó el 12 de septiembre, ni se equivocó el 14 de noviembre.

Manes y el perfil opositor

Fíjese que una de las reservas importantes como dirigente político, médico exitoso como Facundo Manes produjo un comentario y escribió de que el presidente Alberto Fernández tergiversó el resultado de las elecciones, y un poco más dijo que estaba medio chiflado por qué no acepta la realidad, y lo único que hizo el presidente, si uno lo interpreta de buen chipá como decimos los litoraleños, si uno interpreta de buen talante, cuando plantearon festejar es porque no le dieron al Frente de Todos la paliza que le dieron el 12 de septiembre. Recuperaron. Entonces para el FDT, para el oficialismo, era un festejo.

Ahora la oposición, en vez de levantar la vara y proponer un plan superador al plan que se está aplicando en este momento, y empezar a contarle a la sociedad, al pueblo, al hombre de a pie, a don Juan, a doña Manuela, cómo va a ser para achicar la inflación, no como dijo Macri que el otro día dijo que en cinco minutos resolvemos el problema, y triplicó la inflación que dejó Cristina.

La variante Delta y los falsos rumores

Mire, está circulando una cadena de whatsapp, que incluso los salió a desmentir un diario como Diario Tag sobre el cierre de fronteras de la provincia de Corrientes, de Formosa y de Misiones como consecuencia de la cepa Delta. Hasta acá nadie salió a desmentir ni a decir que es certero, ni a decir que es verdad. Ningún epidemiólogo, estamos intentando buscar a ver si podemos corroborar este tema, que es muy delicado, y si uno se pone a mirar qué está pasando precisamente con la cepa Delta, y con otras cepas que están apareciendo, más feroces que la Delta, se espera que en Europa para marzo haya 700.000 muertos. ¿Y dónde está la oposición, y el oficialismo incluso? Preocupándose y contándole a la sociedad cuál es el plan de vacunación, que es lo que se tiene, o cuál es la Argentina que viene. Ah no, pero los contrarios de Milei se preocupan por qué Milei se vacunó. Y si Milei es mentiroso, y se vacunó, pese a que dijo que nunca se iba a vacunar o que era antivacunas. Y bueno, a lo mejor reflexionó y pensó: “no tengo que ser pelotudo para no vacunarme, si esa es la salvación”.  Hay un pensamiento que precisamente habla de que hay muchos pelotudos. Facundo Cantor no es Facundo Manes.

Entonces lo que está pasando es muy delicado, es muy grave. Carím Peche en una carta publicó una nota, que realmente pienso, que Carim Peche tendría que ser analizado por Facundo Manes, porque si ésta es la propuesta política de Peche, estamos muertos.

Quiero leerle a usted porque esto nos mandó a nosotros desde el equipo de prensa de Peche, que recibimos todos los días las actividades de Peche. Y es realmente lamentable lo que publicó: dice Peche “el sabor amargo del látigo y la billetera”. El legislador radical dijo que el pasado 12 de septiembre el Frente de Todos, liderado por el gobernador Capitanich, perdió las elecciones en el Chaco. El pueblo le dijo basta a 14 años de mentiras, humillaciones y atropellos, y el gobernador a los pocos días hizo pública una carta que tituló “recuperar el sentido”.

Continúa diciendo Peche que “digna del más eximio exponente de la cultura de autoayuda. Capitanich dijo sentimos la obligación de pedir perdón por los errores cometidos, por las veces que no supimos escuchar, por los problemas que no supimos resolver, pero estamos a tiempo para escuchar, para resolver y para cambiar lo que verdaderamente hay que cambiar. Pero si estas palabras las hubiese expresado cualquier otra persona que no sea el gobernador, dice Peche, “nos hubiesen conmovido hasta las lágrimas, pero no, provenían de una persona que ha perdido lo más valioso que puede tener el ser humano: el valor de la palabra. A contrapelo de su fé, proclamada a los cuatro vientos, eligió comprar la dignidad de los chaqueños en lugar de ganarse su respeto y admiración”. 

Fíjese, voy a tratar de buscar el concepto que Facundo Manes le esgrimió al presidente Alberto Fernández,  porque él ese mismo concepto le tendría que decir a Peche, que no acepta la realidad, cuando dice que “a contrapelo de su fé, proclamada a los cuatro vientos, eligió comprar la dignidad de los chaqueños en lugar de ganarse su respeto. A pocas horas de la elección del 14 de noviembre, y saboreando el gusto amargo que dejan las victorias logradas a fuerza de látigo y billetera, el otrora rompe diarios hoy parafraseador de la parábola lobos con piel de cordero para referirse a quienes pensamos distinto, terminó siendo el lobo que sale a fagocitarse a los medios de prensa, seguramente enfocado en lo que se animan a decir la verdad, a remarcar la responsabilidad que le cabe en haber convertido al Chaco en la capital nacional de la pobreza y el piquete tras 14 años de su gestión.

Y prosigue Peche sus críticas al gobernador cuando marca que “seguramente quiere callar las voces de quienes denuncian la corrupción y el autoritarismo que define a su gestión, hoy ratificado en su deseo de perseguir a mujeres y hombres valientes que eligen el futuro del país y de sus hijos por encima de las efímeras mieles del poder”.

“Ganar es ganar y perder es perder. El Frente de Todos, que integra  Jorge Capitanich, perdió estrepitosamente las elecciones en 15 provincias y 18 ciudades del país. Deberá saber el gobernador que la rebelión de los mansos se podrá dilatar en el tiempo pero nunca detener presidente”, sostiene Peche, presidente del interbloque de diputados de la UCR.

Peche y Zdero no pueden hablar de corrupción

Ahora, sí a mí me atendiera Carím Peche, porque ahora no me atiende el teléfono. La productora Mónica Espinosa lo llama y lo llama, al igual que a Zdero, pero no atienden el teléfono, y sus asesores de prensa son tan brutos que no son capaces de decirles “mire, a la prensa hay que atenderla”. A esa prensa que ellos mismos están diciendo que Capitanich la persigue, ellos con no atender a la prensa, también hacen una persecución, ignoran a quienes pensamos distinto que ellos, pero los sacamos al aire para que ellos hablen.

Pero insisto, fíjese lo que dice Peche de Capitanich: “a contrapelo de su fe, proclamada a los cuatro vientos, eligió comprar la dignidad de los chaqueños en lugar de ganarse su respeto y admiración”. Entonces Peche quiere decir que los chaqueños que votaron a Capitanich el 14 de noviembre, vendieron su dignidad. Eso les está diciendo, sin decirlo, porque o no tiene huevos o directamente es un psicópata.

Peche no tiene honestidad intelectual

Porque qué le tendría que decir Peche en una carta pública “yo Carím Peche le digo al pueblo del Chaco que son unos sinvergüenzas porque vendieron su dignidad, no tienen respeto, le vendieron el alma al diablo, que es Capitanich”. Eso le tendría que decir Peche a los chaqueños, y no disfrazarse, señalando al gobernador con que eligió comprar la dignidad de los chaqueños en lugar de ganarse su respeto y admiración.

Lo que Peche quiere decir en realidad es que Capitanich utilizó 900 mil o 800 mil revólveres, y le puso un revólver a cada chaqueño para que ponga el voto de él. El voto de los diputados nacionales y provinciales que él conduce. Después continúa Peche diciendo: “a pocas horas de terminar la elección del 14 de noviembre, y saboreando el gusto amargo que deja la victoria lograda a fuerza de látigo billetera”.

Peche no es democrático

No es democrático esto que dice Peche, porque si Capitanich, al otro día, el 13 de septiembre escribió lo que está señalando Peche: “sentimos la obligación de pedir perdón por los errores cometidos por las veces que no supimos escuchar por los problemas que no supimos resolver pero estamos a tiempo para escuchar para resolver y para cambiar lo que verdaderamente hay que cambiar”, y se cargó la campaña al hombro, y revirtió el resultado de las PASO, porque fueron únicamente Chaco y Tierra del Fuego las provincias que revirtieron las elecciones. Peche no tuvo la honestidad intelectual de decir “lo felicito gobernador, porque usted evidentemente supo interpretar el pueblo y ganó las elecciones”. Fíjese que distinto que hubiera sido el tema. Fíjese que distinto.

¿Los radicales se olvidaron de Carosini?

Ahora, ¿Peche se olvidó de Carlos Carosini? ¿No sabe quién es? Porque ése si perseguía a la prensa durante el gobierno de Ángel Rozas. Mire, que yo en este programa, o en Péndulo le dijimos cosas duras a Capitanich, y que Capitanich demostró su altura política, a pesar de que nosotros lo cuestionábamos, porque al cuestionarle a sus ministros lo cuestionamos a él, naturalmente. Pero el gobernador tuvo la altura política de venir al programa a cerrar la campaña política a nuestro programa de televisión, a Péndulo.

Peche no se acuerda de Carosini, que solamente le daba pauta a 5 o 6 medios nada más, y al resto a tomar suero con la chancha. Pensar que a mí me decían que yo era uno de los privilegiados de Ángel Rozas, y un amigo Sergio Schneider escribía en ese entonces en su columna dominical que eran muy pocos los periodistas que criticaban al gobierno de la Alianza. Supongo que entre esos pocos se refería a mí. Porque en ese momento los que se alzaban contra Rozas éramos muy pocos,  contados con los dedos de una mano: Rolando Núñez, Oscar Arévalo y el suscrito: Antonio Guinter. La única afirmación que salió el repudio y comiendo en “Nanas de Cebolla” fue la afirmación que hizo sobre el programa que yo conduzco.

El Rozismo presionaba a la prensa

Ellos saben perfectamente que le hice perder las elecciones a Rozas. El otro periodista fue Manolo Bordón. Y quiero decir algo, porque Peche no tiene que hacerse el otario. Peche y Leandro Zdero hablan de corrupción. Pero Leandro como podés hablar de corrupción vos, sí estás procesado por PIMP hermano. Dejate de joder. Que no se mueva la causa, es otra historia.

A nosotros Capitanich nos llamó por alguna crítica que hicimos en el programa. Ni siquiera a Mónica Espinosa, que es la productora que trata con los funcionarios, porque yo no trato con los funcionarios, y por eso somos un equipo. Nunca nos llamó, ni la llamó a ella para reclamarle con diplomacia o airadamente, tal o cual cosa que dijimos. En cambio, durante la gestión de Ángel Rozas la llamaban casi todos, por ejemplo cuando lo traíamos a Rolando Núñez. En ese entonces el mismo Rozas la llamaba a Mónica, y le decía cosas indescriptibles.

Esto da bronca. Esto que dice Peche con “ganar es ganar y perder es perder, el Frente de Todos que integra Jorge Capitanich perdió estrepitosamente las elecciones en 15 provincias”. Pero ¿y por qué Peche no habla de acá, de que Capitanich ganó las elecciones en el Chaco? ¿Qué revirtió las elecciones en el Chaco? Entonces esto es lo que yo decía: parece que el 14 de noviembre no ocurrió, nada no pasó. Nada. Seguimos en campaña, seguimos con la diatriba, con la descalificación, con no aceptar la autocrítica, con no aceptar. Porque los errores son de un lado y del otro. Los peronistas se tienen que hacer cargo de sus yerros, como los radicales también tienen que hacerse cargo de sus yerros, y juntos, juntos, pensar en el abrazo de Balbín con Perón para poder sacar a este país de la postración y de la frustración en la que está.

La oposición hace oídos sordos al consenso que pide Capitanich

El último hecho político, y que ahora le están dando bomba los medios concentrados con todo, es el atentado que supuestamente sufrió Clarín. Esos medios están alineando la cosa hacia decir que alguien del oficialismo provocó ese atentado, arrojando bombas molotov en el frente de una de las puertas de Clarín.

¿Saben las operaciones que se hicieron y que después se descubrieron que eran auto atentados? No puede ser este el clima político que estamos viviendo, cuando hay medio país que está sumido en la pobreza. Este es el punto.

Hace 48 horas que Capitanich pidió a través de un documento “recuperar el sentido de grandeza”, y las fuerzas políticas no dicen esta boca es mía. Realmente es una vergüenza lo que está pasando, pero hay de todo en la viña del señor. Y cuando digo que algunos dirigentes son brutos, es porque son brutos, son mediocres.

Fíjese lo que dijo, por último, Peche: “el otro la rompe diarios, hoy parafraseador de la parábola lobos con piel de cordero, para referirse a quienes pensamos distinto, terminó siendo el lobo que sale a fagocitarse a los medios de prensa”. Pero si Capitanich no se dirigió a la oposición. Teléfono para Peche. Capitanich cuando citó eso de dejar las 99 ovejas ir a buscar la extraviada, se refirió a ir a buscar a los peronistas que votaron a Juntos por el Cambio. Y parece que dio resultado,  porque lo que pasó el 12 de septiembre se revirtió el 14 de noviembre.

Fuente: Contracara.








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